domingo, 10 de abril de 2011

Reflexiones sobre las reflexiones.

Planteamientos sobre la Autonomía de los Centros Docentes de Titularidad Pública.

Reflexiones sobre las reflexiones.

Quiero comenzar mi participación en este blog, llamando la atención sobre el planteamiento de salida de este documento que, según parece, va a ser la base sobre la que se van a diseñar las escuelas futuras. Me refiero al apartado “Reflexiones sobre la autonomía”, un texto cerrado sobre el cual no se nos ha pedido opinión, y que sin embargo, da por sentado una serie de circunstancias que desde mi punto de vista, no son del todo ciertas, y en cualquier caso son discutibles. En la segunda parte del documento “Propuestas a debate”, sí se nos convoca a proponer y debatir sobre las reflexiones inicialmente expuestas, dando por sentado que estos planteamientos de salida nos satisfacen a todos. La segunda parte del documento, ofrece la posibilidad de debatir y participar sobre nuestro futuro como docentes y el de las escuelas, sin embargo, bajo esta apariencia demócrata y dialogante, las “Reflexiones sobre la autonomía” muestran unos planteamientos estratégicos predeterminados sobre los cuales no es posible debatir. Me interesa señalar que la presentación de “Propuestas a debate” concretas, supone por nuestra parte la aceptación implícita de las “Reflexiones sobre la autonomía”, y es aquí donde apunto mis razones contra este documento:

Primer apunte:

En el punto 2 de la primera parte “Reflexiones sobre la autonomía” leemos el siguiente párrafo:
…“en un centro intervienen actores que, individual y colectivamente, son sujeto de derechos que, en todo caso, hay que preservar. El caso más relevante, por su condición de personal funcionario regulado por norma básica (Estatuto Básico del Empleado Público), el del profesorado. Pero no es infrecuente en este preciso caso confundir rutinas, procedimientos de antiguo cuyo soporte normativo no está claro o, de existir, está sujeto a cambio, con derechos positivos acreditables.

(Señalo en negrita la parte del párrafo sobre la que llamó más atención)

El texto continúa hablando de la conveniencia de establecer límites entre los verdaderos derechos de los profesores y aquellas situaciones de abuso que, según este documento, se dan con frecuencia.

Quiero dejar claro que no podemos aceptar que el abuso o la laxitud en el trabajo de unos pocos quede reflejado como algo común en el profesorado, y más en un documento que pretende ser análisis y reflexión de cara al futuro de la situación actual de la Educación. Creo que ya existen mediadas que pueden ser aplicadas con carácter puntual en aquellos casos en los que existan negligencias. Me preocupa que desde la administración se dé por válida la idea de que “los profesores son unos vagos”, pero más me preocupa que esto pueda ser una excusa para recortar los derechos de maestros y profesores. 

Segundo apunte:

En el punto 4 El punto de partida: una tradición centralizada y centralista”, se denuncia una situación, heredada de antiguo, de excesiva burocracia y rigidez en la Administración y en la Comunidad Educativa en general. Acto seguido incide en el aspecto de que el docente disfruta de libertad ilimitada una vez que ha cruzado la puerta del aula. En este caso vuelve a incidirse en la necesidad de establecer controles para la práctica docente, reclamando la necesidad de una mayor vigilancia en cuanto al cumplimiento de nuestro trabajo diario. Se vuelve a dar por hecho que existe una corrupción generalizada en el cuerpo de docentes. Vuelvo a reclamar la atención sobre este punto para solicitar la NO aceptación de este hecho, que debe perseguirse y castigarse con los medios que ya existen, en los casos que lo requieran.   

Tercer apunte:

En mismo punto 4 “El punto de partida: una tradición centralizada y centralista”, se habla de la renuencia (hacer la vista gorda para no tener que actuar) de los directores de los centros a tomar decisiones sancionadoras o punitivas contra aquellos docentes que incumplen con sus obligaciones. Según este documento esto sucede porque el cuerpo de directores está compuesto de docentes, que son compañeros nuestros en el trabajo diario. Esto enlaza con el punto 6 de la parte 5.3 Autonomía de Gestión en el que se cita textualmente:

…“de la necesaria revisión del sistema de selección y formación de directores y directoras (y de los equipos directivos en su conjunto), así como de sus atribuciones y los tiempo de mandato y la evaluación de su práctica, cabría pensar en cómo los Planes de Inspección y su desempeño real se orientan a facilitar sin renuncia a las obligadas tareas de supervisión el ejercicio de la autonomía.”

Esto me plantea varias preguntas:

a)      ¿Significa esto que el perfil profesional de los equipos directivos cambiará hacia perfiles más parecidos al de gestores empresariales, o incluso al del cuerpo de inspectores?
b)      ¿Insinúa este documento la intención de dividir en dos al equipo docente, creando por un lado un equipo docente (el que daría las clases) y por otro lado un equipo gestor (el que controlaría y administraría el correcto funcionamiento del Centro)?

Esta desvinculación de la práctica docente con la gestora distanciaría a los dos equipos, produciéndose situaciones de falta de contacto con los problemas reales dentro de las aulas. El equipo directivo dedicaría su esfuerzo a “sacar adelante las cuentas”, perdiendo la perspectiva real del que es el verdadero objeto de nuestro trabajo: la formación y la educación de los alumnos, y el día a día en la relación alumno-docente.

Cuarto apunte:

Siguiendo en el punto 5.3 Autonomía de Gestión se apunta la dirección en la que se desarrollará la idea de “Autonomía”. En dos campos principales:

a)      “Ampliar los procedimientos para la obtención de recursos económicos adicionales”…
b)      “Decidir el perfil (profesional) de una parte de los recursos personales”.

La vía de la ampliación de procedimientos para la obtención de recursos económicos me preocupa, ya que puede representar un primer paso hacia la privatización de la Educación. Esto podría implicar la supeditación del sistema educativo a los intereses partidistas de algunas empresas financiadoras, lo que puede derivar en la pérdida de unos objetivos educativos y formativos plurales, para satisfacer unos intereses empresariales particulares y cortoplacistas.  Llamo la atención en este punto porque creo que no existirá “Autonomía”, si los centros educativos pasan a depender del dinero de manos interesadas.

Sobre al punto b, la decisión en la selección del perfil profesional de parte del personal. Ignoro a qué parte del personal se refiere, pero opino que se debe tener especial cuidado para que este “campo de crecimiento posible para la Autonomía” no derive en situaciones de selección arbitrarias que puedan servir para la colocación “a dedo” de los amigos de estos renovados equipos directivos.

Quinto apunte:

En el punto 5.4 Autonomía para planificar y desarrollar la mejora de los centros docentes y el crecimiento profesional de los docentes se establece la obligatoriedad de la formación permanente del personal docente. Estas actividades de formación permanente vendrían determinadas por las necesidades de los centros así como su gestión (horarios, contenidos, etc.).
Quiero señalar que creo que es responsabilidad de cada docente la actualización de sus conocimientos, y que la mayor parte de los docentes somos conscientes de la evolución de las tecnologías y de cómo esto afecta al aprendizaje y a la práctica de los distintos oficios. Este documento vuelve a poner en duda la dedicación y la ética profesional de este colectivo, y cuestiona nuestras capacidades para la enseñanza. Se vuelve a convertir la excepción en norma, “aprovechando” casos aislados para crear una obligatoriedad que nos afectará a todos.

Sexto apunte:

En el punto 7, “El papel de los compromisos singulares”, surge una nueva figura de “contrato” entre centros y administraciones para conseguir financiación a través del desarrollo de programas para mejorar el éxito de alumnado. Dice además que “los compromisos singulares deben jugar un papel relevante en el desempeño de la gestión autónoma de los centros”. Una vez más me surgen dudas:

a)      ¿Hasta qué punto dependerá la financiación de los centros de estos contratos con la administración? (Observo que el texto dice que deben jugar un papel relevante).
b)      Si este sistema contractual deriva en una excesiva dependencia de estos fondos ¿no estaríamos poniendo en peligro el programa curricular predeterminado para dar prioridad a proyectos diseñados de forma forzada para la obtención de dichos fondos?


Espero que mi opinión ayude para, entre todos, crear un sistema más justo y satisfactorio para toda la Comunidad Educativa.
                                                                                                         

JAFD

viernes, 8 de abril de 2011

RESPETO. "Una cuestión de Orden"

1º. Ayer Jueves día 7 alguien publicó (quiero pensar que por error) un comentario dentro de la entrada de una compañera en vez de hacerlo en el lugar destinado a los comentarios.
Me hago responsable de haber suprimido el comentario de dicha entrada ya que no estaba ubicado en el lugar correcto y el tono del comentario rayaba la ofensa personal. Debemos respetar la integridad de las aportaciones de cada uno/a y hacer los comentarios en el lugar indicado (donde dice comentarios).

2º. Ruego a la persona que lo hizo que lo ubique en el lugar adecuado, al tiempo que le pido que dentro del respeto a la libertad de expresión, procure no hacer alusiones personales que resulten ofensivas o molestas en beneficio de todo el grupo.
Por tanto y respetando la opinión de cada cual hago un llamamiento al respeto y la cordialidad.
Muchas Gracias a todos/as

jueves, 7 de abril de 2011

¡QUE VOY A SACO! Paco.





Permítame Sr. Gálvez algunas observaciones al texto que nos adjunta en su entrada titulada "Un coup de dés jamais nábolira le hasard". Había considerado en un principio copiar el texto íntegro e ir introduciendo las observaciones a cada párrafo para facilitar tanto la elaboración de la crítica como su localización, pero quizá sea un esfuerzo innecesario, tedioso y poco conveniente, hasta aburrido díria. Quizá alguna anotación a pie de párrafo sea conveniente, ya veremos pues Krónos será hoy el regidor de mi discurso.
Tanto el texto de Rosa Cañadell (militante histórica catalana del movimiento social anticapitalista, como su referencia al mismo como única fuente de argumentación, dejan al descubierto notorias flaquezas dialécticas, de corte populista y con cierto sesgo o tendencia a la manipulación de nuestras humildes y pobres opiniones.
Está bien que se alcen voces críticas contra cualquier reforma o propuesta gubernamental, es un buen indício de libertad y un sano exponente democrático. Utilizar argumentos falaces como estrategia de persuasión es lícito, aunque puede ser cuestionable en algún caso desde el punto de vista moral. 
Utilizar una entrevista de alguien cuya trayectoria personal y profesional está íntimamente vinculada a ideologías de corte extremista y anti-sistema (Publicado en El Viejo Topo. "La izquierda de la izquierda"), sin una opinión de contrapeso, resta objetividad y credibilidad a todo su argumento. Este común error que procuramos rectificar en nuestro alumnado cuando, utilizan el recurso de la inmediatez sin contraste alguno, debemos observarlo para nosotros mismos, nuestras argumentaciones y nuestras estrategias de comunicación.
Vaya Sr. Gálvez, ¡que se le ve el plumero!

El texto que nos presenta la Sra. Cañadell es un completo catálogo de la falacia, manejado eso sí con cierta torpeza en algunas partes del discurso. Perdone que insista en el tema.
Su argumentación se basa en una estrategia del miedo, situando al lector ante un mar de ambigüedades y desconcierto, una estratégia psicológica de relaciones de poder entre quien lanza el discurso y quien lo recibe y utilizando su prestigio y posición como aval de su argumento. Si lo dice la Sra. Cañadell será cierto, pensará el inerme lector. Nada más lejos de la realidad. Fíjese como ya en el primer párrafo, desvía la atención del problema principal para ganarse la posición y el beneplácito del lector pusilánime con un claro propósito de sedición.   
"Parece que la educación de este país no levanta cabeza, al menos esto dicen los indicadores PISA y otros. Es cierto que algo anda mal en nuestras escuelas, pero no tanto por lo que dicen las estadísticas (que, como todos sabemos, miden lo que interesa y se interpretan según conviene) sino por el malestar que va en aumento, sobre todo entre el profesorado."
Parece que la educación de este país no levanta cabeza... es una frase traída de un modo intencionado. Se dice se comenta... dicen otros... pero ya sabéis que su opinión es interesada (PISA y otros). Pero en verdad yo os digo que no anda mal porque lo digan esos de PISA y otros, sino por el malestar que tenéis vosotros y vosotras profesores y profesoras del mundo. En verdad yo os digo que todos vuestros problemas profesionales surgen de ese malestar, que todos los problemas de la enseñanza en este país y los malos resultados son fruto de ese malestar que se os produce. 
Bueno una interpretación obviamente exagerada pero en su esencia ajustada. Solo falta que el lector complete la intencionada elipsis de la sentencia, es decir que focalice toda su ira en quien le produce tanto malestar y es el verdadero y único causante de que la educación en este país no levante cabeza; la administación, el estado.


(Estoy en la escuela y escucho las señales del impaciente emisario de Krónos y debo abandonar, al menos temporalmente esta conversación, pero si le place hemos de continuarla bien en este espacio virtual o en cualquier otro físico en compañia de las viandas más convenientes. Si es menester yo invito)

Reductio ad absurdum. (absurdamente reducido)

PLANTEAMIENTO DE LA ECUACIÓN:
A tiene una necesidad y cuenta con P para que la cubra. P cree estar suficientemente preparado para hacerlo y lo hace según las pautas iniciales de A. Pronto P descubre atajos para eliminar muchos pasos y requerimientos del proceso porque los considera innecesarios. A se desentiende y P se acostumbra a ir a su aire y no tiene en cuenta la evolución de las propias necesidades. Poco a poco el resultado C se va degradando y no se corresponde con la necesidad real de las cambiantes condiciones del entorno. Un día A se asocia con nuevos socios. S controla a los socios de A y por ende a A misma. S comprueba que el resultado C de no se ajusta a los requerimientos reales que se demandan y le pide explicaciones a A. A le echa la culpa a P y P se defiende culpando a A por haberse desentendido y no haberle dotado de recursos suficientes para un mejor logro de los resultados. Entonces A cuestiona la capacidad de P. A lo largo del tiempo, P se ha ido asociando para consolidar sus derechos y no verse perjudicada por A, de quien no se fia. P ha cogido un status y adquirido unos derechos. A en un intento desesperado y ante su incapacidad para solucionar el problema copia modelos de sus socios e intenta aplicarlos en su proyecto, insertando parches y obligando a P a realizar los ajustes y cambios. Algunos cambios le vienen bien a P1 pero mal a P2 y P3, otros le vienen bien a P3 y mal a P1 y P2. P no quiere cambiar y renunciar a su status y culpa enérgicamente a A por no haber sabido implementar soluciones adecuadas. Mientras tanto C llega a límites ínfimos de calidad. P se queja a A de la degradación de C para obtener los resultados adecuados, culpando a A entre otros agentes.  A le recuerda a P que los procesos y materiales para lograr C los genera la propia P. P3 culpa a P2 y P2 a P1. S obliga a A a tomar medidas y a A busca nuevamente en modelos externos y encuentra una solución. Si yo necesito C con calidad (X), que P1, P2 y P3 definan su propio modelo para obtener la (X). A propone pagar a P en función de la calidad de C de acuerdo a los requerimientos de y penalizar a P si los resultados no se alcanzan. A propone a P una formula de gestión basada en los nuevos modelos productivos impuestos desde S: si S necesita C, P desarrolla de forma autónoma C y A controla la calidad de C para entregar resultados a S. A dentro del pequeño margen de maniobra que le deja S, propone a P estudiar propuestas. P se niega porque considera que un cambio en su status adquirido le afecta negativamente. S hace ver a A que si C no cumple los requisitos mínimos C quedará fuera del mercado que controla S y en consecuencia A se quedará sin las prebendas que le otorga S. S le hace ver a A que lo importante para el futuro no es P sino C.
Para aceptar la propuesta de A, P debe hacer un gran esfuerzo, cambiar radicalmente de mentalidad y ponerse rápidamente las pilas. P que está acostumbrada a los faroles y la ineficacia en este tipo de gestión de A pasa de todo y bajo argumentaciones varias rechaza hacer propuestas a A e insiste en defender su status.


SOLUCIONES 
Solución 1A sin contar con P proyecta un sistema dictado desde S y se lo impone a P. P se moviliza contra A, A aprieta las tuercas a P con instrumentos específicamente diseñados para ello. P reacciona y gasta toda su energía en defender su status adquirido, mientras tanto C agoniza. S se mosquea provoca la caída del status de P y organiza un nuevo sistema deshaciéndose de gran parte de y creando un nuevo modelo P´. Surge un nuevo horizonte para C y por tanto . (no sabemos si C´ es mejor o peor que C, porque nos movemos en el ámbito de la teoría pura)


Solución 2. P participa del debate y hace propuestas razonadas a A. A las tiene en cuenta o no pero en la  negociación P mantiene muchos de sus derechos a cambio de replantearse el sistema de su propio modelo de trabajo para intentar mejorar C. Acepta incorporarse al reto de enfrentarse a una nueva realidad social y productiva para C.  Acepta trabajar de manera más sistemática y sometida a procesos de control. A pesar de los faroles del pasado y de su falta de compromiso, A por imperativo de S apoya este modelo y lo potencia. C se recupera hacia un nuevo horizonte hasta entonces desconocido. (por supuesto que tampoco sabemos si ese nuevo horizonte es mejor o peor que, porque nos movemos en el ámbito de la teoría pura)


1. Resuelve la ecuación indicando cuál de las dos soluciones propuestas es la verdadera y cual es falsa e imposible de alcanzar según el planteamiento y en base a tu experiencia.

2. Del siguiente listado de términos, identifica A, P, C y S y deduce P1, P2, P3 y P´y C´ (Algunos términos son falsos para  despistar, por favor concéntrate en las respuestas).
Sistema, Caperucita Coja, Administración/administraciones, Flores, Profesorado, Un taxi, Conocimiento y formación del alumnado,

3. Identifica los errores o planteamientos tendenciosos y sustitúyelos por otros más adecuados, (pero no te olvides de indicar claramente una solución).

Anímate Paquillo! Ándale!

otro mas

2. “Elementos para el debate”.

1. Sobre las estructuras de participación.
Aportaciones: Ninguna.

2. Sobre los órganos de gobierno.
Aportaciones: Ninguna.

3. Sobre las estructuras de coordinación docente.
Aportaciones: Ninguna.

4. Sobre la concreción del currículo y las programaciones didácticas.
Aportaciones: Ninguna.

5. Sobre las normas de convivencia, organización y funcionamiento.
Aportaciones: Ninguna.

6. Sobre las actuaciones para lograr la equidad con calidad y el éxito educativo.
Aportaciones: Ninguna.

7. Sobre la formación dirigida a la mejora del centro.
Aportaciones: Ninguna.

8. Sobre la admisión del alumnado y los programas y servicios educativos.
Aportaciones: Ninguna.

9. Sobre el proyecto de gestión y la obtención de fondos.
Aportaciones:

Los centros podrán obtener recursos complementarios previa aprobación del consejo escolar, pero nunca mediante aportaciones de las asociaciones de familias y de alumnado. Para ello, podrán facilitar el uso de sus equipamientos e instalaciones a terceros. Los ingresos que así se generen se aplicarán a los gastos de funcionamiento.
Entonces la propuesta del equipo directivo, que se hizo vía e-mail por el Secretario del centro de hacer una estimación del presupuesto por alumno y curso, estaría fuera de toda normativa.

Los centros podrán formular requisitos de titulación y capacitación profesional respecto de determinados puestos de trabajo docente y no docente. Específicamente, el equipo directivo podrá proponer el perfil del profesorado necesario y, singularmente, del profesorado para sustituciones.
Esto supone dar mucho poder de decisión a los centros, siendo el equipo directivo el que elige al profesorado que está en sus centros y no es el propio profesor el que elige el centro en el que quiere estar.

10. Sobre el proyecto educativo, los objetivos del centro, la evaluación y la rendición de cuentas.
Aportaciones: Ninguna.

3. Otras aportaciones de carácter general:
La parte de PROPUESTAS A DEBATE creo que está bien estructurada en general. ¿No es lo que se está haciendo hasta el momento sin autonomía alguna?

La autonomía es capacidad de autogobierno de los centros docentes, lo que exige un Equipo directivo con amplia capacidad de decisión y de acción, y un claro respaldo y apoyo de la Administración y de la comunidad educativa.
¿Este apoyo sería sólo económico o de tiempo de dedicación de todos los que formamos la comunidad educativa?

Sin responsabilidad y rendición de cuentas (con sujeción a evaluación y control) no hay autonomía. Sin autonomía no cabe la responsabilidad. ¿Estamos diciendo que actualmente no somos responsables de lo que hacemos?

De otro lado, el límite social, ético y político de toda autonomía es el que previene la desigualdad.
Si cada centro se autogestiona, sí se podrá hablar de desigualdad, porque cada uno lo hará como quiera o pueda. Además, la posible desventaja de los alumnos y profesores según el centro en el que estén adscritos.

Así, el ejercicio de la autonomía debe ser conciliable con la existencia de un espacio común de igualdad de oportunidades para todos los miembros de la comunidad educativa.
¿A qué se refiere con un espacio común de igualdad de oportunidades?

Tampoco podemos contemplar el supuesto de que haya centros que renuncien al ejercicio de su autonomía (o no quieran ejercerla). El de la autonomía es un ejercicio irrenunciable, como el de la participación o la evaluación.
Pues con esto queda todo dicho, o sí o sí a la autonomía.

La autonomía organizativa.
La cuantificación de horas, cerradas siempre, que se asignan a cada órgano y tarea.
El establecimiento de horarios rígidos y poco flexibles, y uniformes.
¿Se pretende hacer unos horarios flexibles y cambiantes cada cierto tiempo como existe en numerosas empresas privadas, donde hay turnos de mañana, tarde y noche?

Autonomía de gestión.
No se explica mucho este punto porque de dónde se van a obtener recursos económicos. Aportación de las familias, de los miembros del claustro, de la Administración???

Debería formar parte de las competencias de los centros la planificación de los tiempos, de los contenidos y del calendario de formación en el propio centro, con una propuesta ligada a las necesidades de formación que se deriven del análisis de las evaluaciones internas y externas.
Este punto es importante que se realice para beneficio de todos.

miércoles, 6 de abril de 2011

Un coup de dés jamais n'abolira le hasard

Creo que quedó suficientemente clara mi postura ante el texto según lo que apunté en mi intervención en el pasado claustro: rechazo del texto por la sencilla razón de los términos en que se plantea, no solo por el hecho de no compartir el uso de las palabras que allí aparecen, sino por tratarse de una serie de dictámenes que en ningún caso parecen el fruto de una reflexión medianamente asentada que venga a resolver nuestro maltrecho sistema educativo. Pido disculpas si resulté vehemente en algún momento o si lo soy ahora.

Para que la partida pueda llegar a buen término los jugadores deben establecer unas reglas o pautas acordadas de antemano – algo así como el número de veces que lanzará los dados cada uno en su turno-, en nuestro caso los términos del debate. Como plantea Carlos en su jugosa intervención, el documento aparece, en efecto, contradictorio por fragmentario, falaz, sin justificación, un dogma. Tira tú una vez que ya tiraré yo dos.

Comento brevemente algunos aspectos que considero esenciales dentro de la articulación del documento.

1. Independientemente del punto de vista particular que finalmente se adopte a la hora de abordar el texto, cabe pensar cuales son aquellos bajo los cuales se pretende que este texto sea interpretado, esto es ¿Quiénes piensan ellos que leen este texto?
El primero de ellos corresponde a los equipos directivos, que ven la posibilidad rápida de solución ante problemas de diversa índole de los que los centros se ven aquejados. Seguido de la lectura que pueda hacer el conjunto del personal docente, funcionarios e interinos, que pueden observar el previsible cambio que supone la propuesta, desde cierto inmovilismo y/o pasividad achacable al desconocimiento de las causas y posibles efectos sobre su situación laboral o, por otro lado, la hasta el momento, incuestionable certeza de su estatus laboral. Cabe además señalar un tercer punto de vista, aquel que limita la visión de la cuestión considerándola únicamente desde el propio centro de trabajo y no en el conjunto del sistema educativo en todos sus niveles.

2. Sobre la cuestión de la aparentemente novedosa terminología no está demás señalar, como se apuntaba en el texto que anteriormente y de manera quizás un tanto desafortunada,  se colgó en este espacio, esta tiene un origen claro. Ese conjunto de palabras tales como eficacia, eficiencia, éxito, selección, rendimiento, calidad, servicio educativo, singular…, parece una suerte de grupos de vocablos conceptualmente homogéneos. Estos usos lingüísticos obedecen al acercamiento por parte de los responsables en materia educativa, con independencia del signo político, a los dictámenes de los diversos informes emitidos por la ofensiva liberalizadora del sector educativo del Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio, que apuesta claramente por una concepción de la educación más individualista, competitiva y utilitaria, frente al llamado Informe Delors, de la UNESCO, impulsor de una concepción más emancipadora de la educación, a la que finalmente se le ha ganado terreno.

3. Ya que parecemos conminados al uso inexcusable de nuestra autonomía, esta más bien parece heteronomía, como su justo contrario, aquella que establece la distinción entre quien dicta la norma de conducta y aquel que se limita a realizarla. Autonomía supone una capacidad para formular y realizar, a la vez, decisiones justas. El principio de autonomía es una condición indispensable para llevar a buen término la labor docente, junto a otras claves fundamentales de la educación (individualización, socialización, creatividad, participación…).

Por último poco me queda más que añadir cuanto más si el proceso parece ya imparable. Habrá quien observe esto con benevolencia, como un nuevo intento por salvar los restos del naufragio, pero no, que no quieran hacerme comulgar con ruedas de molino. Seamos eficientes para ser eficaces. Sea de ello lo que quiera. No me entretengo más. En el claustro nos vemos.

No puedo resistirme a incluir de nuevo, como colofón a este entretenido debate, otro texto de Rosa Cañadell.


¿POR QUÉ LO LLAMAN AUTONOMÍA CUANDO QUIEREN DECIR CONTROL?

Parece que la educación de este país no levanta cabeza, al menos esto dicen los indicadores PISA y otros. Es cierto que algo anda mal en nuestras escuelas, pero no tanto por lo que dicen las estadísticas (que, como todos sabemos, miden lo que interesa y se interpretan según conviene) sino por el malestar que va en aumento, sobre todo entre el profesorado.


Pero lo más preocupante es lo que está por venir. Ante los informes negativos, nuestras autoridades educativas parecen haber encontrado el remedio ideal: LA AUTONOMÍA DE CENTRO. O sea, el cambio en la gestión de los centros públicos. Nada nuevo, de hecho hace ya tiempo que la ofensiva neoliberal en educación (léase recomendaciones del BM, OMC, UE, OCDE) están tratando de imponer un catecismo a lo largo y ancho de este mundo global. El “pack” en cuestión se está imponiendo por igual en la educación pública de Cataluña, Andalucía, Nicaragua, Gran Bretaña, Argentina, Chile, Bélgica… y un largo etcétera, y consiste en cuatro medidas básicas: Autonomía de centro, direcciones profesionalizadas, evaluación e incentivos por resultados. Todas ellas tomadas directamente de la filosofía empresarial y aplicadas ahora a los centros educativos. 

Pero ni la escuela es una empresa, ni estas medidas han supuesto mejoras en la educación allá donde se han aplicado. Lo que tampoco es de extrañar, ya que el objetivo real no es mejorar la educación. El objetivo real es disminuir la responsabilidad del Estado, aumentar la gestión privada del dinero público, flexibilizar las condiciones laborales de los docentes y controlar los resultados. Se trata de abrir los centros educativos dentro del “mercado” para que los padres y madres puedan elegir a su gusto, y para ello hay que fraccionar el sistema público, estimular la competencia entre los centros y hacer muchos rankings de resultados. Se trata también de controlar, no sólo a los trabajadores, sino también a los curriculums, los contenidos y los procesos educativos para que sean adecuados a las necesidades de las empresas. O sea, todo lo contrario a la verdadera autonomía escolar.

 La autonomía en los centros escolares no es ninguna novedad, sino una vieja práctica del profesorado que, más allá de las directrices oficiales, ha buscado siempre nuevas estrategias docentes para adaptarse a las necesidades del alumnado, siempre diverso y distinto. Tampoco es nuevo el Proyecto de Centro que ahora se vincula con la nueva autonomía. La LOGSE, en el 1985 ya introdujo la obligación de todos los centros de elaborar un Proyecto educativo y un Proyecto curricular. Estos proyectos se elaboraron con la participación de todo el profesorado y con la participación de la comunidad educativa. La diferencia es que ahora los Proyectos de Centro vendrán determinados por los Proyectos de Dirección, que no han sido ni elaborados ni aprobados por el profesorado. En definitiva, la autonomía hace tiempo que se practica en los centros educativos y los proyectos hace años que se inventaron.

¿Por qué ahora se resucita todo ello? ¿Cuál es la novedad? La novedad es que bajo el anuncio de la autonomía se esconde lo que realmente se pretende implementar: la jerarquización de las relaciones dentro del centro, la potenciación de la figura del director/a como jefe de personal, la consecución de más recursos ligados a “mejores proyectos y mejores resultados”, la evaluación de todo y de todos y una carrera docente del profesorado (léase condiciones de trabajo) ligada a los resultados del alumnado. Nada de ello resuelve los problemas que se viven en los centros escolares. Lo  que el profesorado lleva tiempo reivindicando es que la Administración le proporcione los recursos necesarios para poder llevar a la práctica lo que colectivamente han decidido: profesorado suficiente para atender las nuevas necesidades (inmigración, conductas disruptivas, integración, retrasos escolares, etc.), menos alumnos por aula en los centros con alumnos que tienen muchas dificultades, más profesionales para atender a nuevos problemas sociales, psicológicos o culturares, tiempo suficiente para coordinarse y reflexionar conjuntamente, formación adecuada para afrontar los nuevos retos, etc.

Lo que proponen nuestras administraciones educativas bajo el nombre de autonomía es muy distinto de lo que los centros necesitan e implica una nueva concepción de la educación pública, con consecuencias muy negativas. La primera es el desmantelamiento del “sistema público” entendido como un todo, pasando a considerar a cada uno de los centros educativos como una entidad aparte, a los que se les adjudicarán distintos recursos y profesorado en función del resultado escolar del alumnado. Ello implica la creación de centros públicos de distinta categoría: aquellos que tengan la suerte de tener un alumnado con pocas dificultades, tendrán mejores resultados y, por lo tanto más recursos, con lo que serán más atractivos para las familias más motivadas, y así se concentrará en unos centros el alumnado con más posibilidades y los mejores recursos. Con ello aumentará la fragmentación social entre los centros públicos que se sumará a la ya existente entre públicos y privados concertados, imposibilitando, cada vez más, la igualdad de oportunidades que todo servicio público tiene la obligación de ofrecer.

La segunda consecuencia es el fin de la democracia en la organización de los centros públicos que quedará en manos de la dirección, limitando la participación del profesorado en todas las decisiones, tanto pedagógicas, como organizativa, así como la de los padres y madres. Teniendo en cuenta que la educación es una tarea colectiva, en la que la participación y el trabajo en equipo son imprescindibles, otorgar excesivo poder en manos de una sola persona, no garantiza mejorar la docencia en el aula y puede crear muchos problemas: arbitrariedad, sumisión, imposición, etc., lo que implica limitar la pluralidad pedagógica e ideológica del profesorado, que es una de las riquezas de nuestros centros públicos. Para educar por y para la democracia hace falta poder ejercerla por parte de toda la comunidad educativa. Por otro lado, pretender mejorar los resultados escolares del alumnado a base de organizaciones jerárquicas o de incentivos individuales es un grave error y un esfuerzo inútil.

Por último, se pone en peligro la educación global, entendida como un conjunto de saberes, normas y valores: si lo que va a condicionar el salario del profesorado y el prestigio del centro son los resultados del alumnado a partir de las evaluaciones externas, toda la acción educativa acabará centrándose en preparar al alumnado para dichas pruebas. Se corre el riesgo, también, de que disminuya el interés para trabajar con el alumnado que tiene más dificultades, sean sociales, psicológicas o de aprendizaje, ya que este tipo de alumnos requiere mucho esfuerzo y pocos resultados, lo que pude implicar el progresivo abandono del sector más vulnerable del alumnado.

Todos los estudios han confirmado que la variable que más incide en los resultados escolares es el nivel socio-cultural de las familias y el tipo de dedicación que éstas dan a sus hijos e hijas. Un servicio público debería compensar el déficit de los centros y de los chicos y chicas que tienen más dificultades planificando más recursos, más profesorado, más formación, etc. y no traspasar su responsabilidad  al profesorado sancionándolo por los resultados de sus alumnos. Esto es no entender nada de cómo funciona la acción educativa.

Finalmente, quiero señalar que en este país “vamos” cuando otros ya “vuelven”. En Gran Bretaña,  uno de los países en que se implementó este tipo de organización hace años,  ya han constatado su fracaso: no solamente no consiguieron mejorar los resultados escolares sino que han tenido que cambiar su orientación a partir de las quejas de los padres y madres por el estrés a que estaban sometidos sus hijos como consecuencia de las múltiples evaluaciones y la presión del profesorado. Lo que sí consiguieron fue desmantelar el sistema público y aumentar las escuelas gueto en los barrios marginales. ¿Es esto lo que se proponen nuestras administraciones educativas? ¿Es esto lo que queremos para la educación de nuestros chicos y chicas? ¿Queremos una sociedad segregada? ¿No deberían unos gobiernos que se dicen de izquierda velar por la cohesión social y prevenir los conflictos que genera la marginación?

Rosa Cañadell.
Psicóloga. Profesora. Portavoz del sindicato USTEC·STEs

martes, 5 de abril de 2011

TU HAZ. DAME RESULTADOS. YO TE VIGILO.

He estado mirando bastante documentación y está claro que la implantación de un sistema de autonomía en los centros es ya imparable. Como sabéis hay varias Comunidades que lo han implantado ya y otras muchas lo llevan en fase de desarrollo. 
Tu haz, dame resultados y yo te vigilo, representa de manera sintética lo que yo voy entendiendo que va a suponer esta implantación.
Como idea, parecerse a ciertos países del norte de Europa está muy bien, pero las ideas son solo ideas y esto es España, curiosamente llena de españoles/as. Aquí el Rey no pasea tranquilamente sin escolta por el centro de la ciudad como hace Harol V por Oslo ni dejamos las puertas de las casas abiertas, ni pagamos un sueldo a nuestros estudiantes. No somos ni Noruega, ni Suecia, ni Finlandia, ni tan siquiera Francia. Somos Egpaña!
Ya hemos comprobado que meter con calzador en nuestra educativo partes de otros no ha sido una buena fórmula para mejorar la calidad de nuestra enseñanza, incluso cuando el inserto, a modo de parche, parecía ser una buena opción. Nuestro sistema requiere de una profunda reestructuración que nunca llega y el constante "baile" al que nos vemos sometidos nos desmotiva profesionalmente, pero hay que reconocer que también supone una coartada perfecta, una excusa ideal para eludir en muchos casos nuestra responsabilidad profesional y adecuar las situaciones o requerimientos a nuestra conveniencia. Teóricamente y con esta nueva propuesta, eso debe corregirse. Pero para ello no solo hay que cambiar las estructuras educativas, sino también y mucho más importante a mi juicio debemos cambiar nuestra mentalidad. Formatearnos. Y yo tengo muy claro que si no existe una expresa obligación de hacerlo, no se hará. Por eso fundamentalmente no nos gusta. Lo demás son cantos de sirena de producción propia.
La idea de dejar hacer bajo el control externo es buena a mi parecer ya que nuestro servicio (que cumple con un derecho fundamental) debe tener una finalidad social clara, cada vez más diluida. En otros países la educación es muy importante, goza de prestigio y se le otorga gran valor. En nuestro país ser profesor está mal visto. Somos un colectivo poco o mal instruido que soporta como puede la embestida de hordas de jóvenes desmotivados, criados al amparo de una sociedad peculiarmente permisiva y protectora que no ha sabido inculcarles el valor del esfuerzo. Nosotros formamos parte de ello. Como hijos o como padres y también como profesores contribuimos cada día a mejorar o a empeorar esta situación, todo depende del sentido común que apliquemos y de nuestro grado de implicación y responsabilidad. Repito por si no ha quedado claro: IMPLICACIÓN y RESPONSABILIDAD.
Bien mirado, "Haz, dame resultados, yo te vigilo" es lo que debería ser. Debemos hacer nuestro trabajo, conseguir que nuestro alumnado progrese en su formación de una manera adecuada y coherente con las exigencias de nuestra actual sociedad y al mismo tiempo la sociedad, a través de sus múltiples ojos debería vigilar muy de cerca nuestro trabajo. Por tanto no debería asustarnos esta cuestión y sí otras.
El Lunes hay un Claustro para valorar las propuestas. Algunos departamentos ni siquiera han convocado reunión para tratar este tema, otros lo han tratado de forma rutinaria, soslayada y otros han dejado abierta la participación confiando en la responsabilidad y compromiso de cada profesor/a. El lunes hay Claustro. El lunes veremos si se dibuja la otra cara de la moneda, la que se le olvidó dibujar a Paco en su primer texto.

UN POCO DE DOCUMENTACIÓN, PARA ACLRAR ALGUNAS CUESTIONES

Realizando un rastreo por la red sobre el tema se encuentra una gran cantidad de material. Opiniones muy diversas y desde diferentes puntos de vista e intereses. No obstante se observan bastantes elementos comunes y coincidencias y no por casualidad, casi todos recurren a las mismas fuentes. Si se estudian mínimamente algunos documentos como los que os incorporo más abajo, se puede comprender mucho mejor el texto que tenemos para debatir y también el origen de los conceptos tan ambiguos que recoge.
Aquí hay diferentes enfoques y puntos de vista. Existen muchos más, pero para hacernos una idea más clara de por dónde van los tiros, yo he empezado a trabajar con los siguientes:

Antonio Bolivar Botis. La autonomía de los centros educativos en España.
http://www.educacion.es/cesces/revista/n13-bolivar-botia.pdf

Pilar Calero López (Presidenta del Consejo Escolar de Castilla La Mancha). La autonomía de los centros educativos, una reflexión necsaria.
http://www.educacion.es/cesces/revista/n13-calero-lopez.pdf

Consejería de educación del Gobierno deCanarias. La autonomía de los centros escolares. El centro como marco de lacalidad educativa.
http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/udg/insp/Revista2007/content/articulo11/articulo11.htm

Pedro Hernández Pérez. Una propuesta de autoevaluación de centros.
http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/udg/insp/Revista2007/content/articulo7/articulo07.htm
(Ver resto del artículo en el siguiente enlace)
http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/udg/insp/Revista2007/content/articulo7/7PEDRO%20HERN.FEBRERO%20DE%202007.pdf

José Manuel Cabada Álvarez. Director CAP de Colmenar Viejo. La autonomía de los centros educativos.
http://comunidadescolar.educacion.es/810/tribuna.html

Pablo Zoido. Analista OCDE. La autonomía de los centros educativos como factor de la calidad: una perspectiva internacional.
http://ceib.caib.es/documentacio/encontres/toledo/CONFERENCIA_SR_PABLO_ZOIDO.pdf

lunes, 4 de abril de 2011

CUESTIÓN SEMASIOLÓGICA Y ENTORNO FALAZ.

El documento se articula en dos partes formalmente diferenciadas: I REFLEXIONES SOBRE LA AUTONOMÍA y II PROPUESTAS A DEBATE. Lo que dice el documento queda escrito en él, pero lo que significa depende de la perspicacia de cada lector, de su capacidad o agudeza para discernir su verdadera trascendencia y significado. Es sin duda una cuestión profundamente semasiológica.
En la parte primera se establecen una serie de principios a modo de preceptos poco razonados y que parecen más bien sentencias, que propuestas para la reflexión, p.e. cuando dice en el primer párrafo “La autonomía, que es sin duda un factor de calidad de la educación…
Yo me pregunto como puede saberse de la calidad de algo si no se ha experimentado todavía y si ni siquiera se ha llegado a formular. Tal afirmación se construye sobre un Argumentum ad populum o sofisma populista y que es una variante del Argumentum advericumdian o falacia de la autoridad, es decir atribuye la opinión propia a la opinión de/para un grupo (la mayoría). Este tipo de falacias por generalización de inducción errónea son utilizadas habitualmente por nuestros políticos y dirigentes, denotan una intencionada clase de proselitismo hacia la fe. Fe vs razón (para que luego se queje tanto la Conferencia Episcopal)
El documento en su globalidad es contradictorio o quizá paradójico porque no se sabe bien si las aparentes contradicciones en realidad lo son o pertenecen a una única especie de realidad. Por otra parte la fragmentación de las ideas y las incorrecciones en su redacción, siembran de dudas el documento y hacen difícil una comprensión coherente y racional del mismo. La cuestión es, si esta manera de proceder es intencionada o no. Si responde a una estrategia planificada o por el contrario es fruto de alguna clase de precipitación o incompetencia. En este sentido el título del apartado 1, es bastante esclarecedor, al tiempo que inquietante 1. La autonomía es una metodología que persigue un fin y conlleva un plus de responsabilidad y dación de cuentas.”
El espíritu de todo el documento y posiblemente su finalidad última se concretan en esta primera frase.
Más allá de la aparente incorrección en el arranque de la expresión inicial, pues identifica o atribuye cualidades de un procedimiento o modo de obrar en algo (methodus) a un estado o condición de algo o alguien (autogobierno de los centros educativos) y que podemos hacer más comprensible del siguiente modo: la capacidad de autogobierno o autogestión de los centros educativos es el conjunto ordenado de operaciones, reglas… (modos) orientadas a la obtención de un resultado, que persigue un fin… (esa redundancia me preocupa muchísimo)
Por tanto yo leo, que para quien suscribe la frase el concepto de autogestión de los centros es igual a un procedimiento reglado (normativo) que persigue un fin concreto.
Esta frase tiene miga. Aunque parece puramente banal no lo es en absoluto.
De todas las redacciones posibles para definir el término Autonomía (de los centros educativos) se ha elegido “…es una metodología que persigue un fin y conlleva…" centrando así la base de su discurso en un discurso cerrado y unívoco.
Por tanto lo que el más común de los mortales entendería por la misma expresión, aquí no cuenta. Nada tiene que ver ni por similitud, ni por semejanza del término con otras clases de autonomía conocidas, como por ejemplo la autonomía de que goza una Comunidad Autónoma en una competencia transferida, llámese educación, sanidad, etc.
De esta forma se desarrollará la LECLM sin la necesidad de contar con un verdadero concepto de autonomía para los centros educativos públicos, porque recordemos que este decreto solo afectará a los centros de enseñanza que sean públicos, los privados ya gozan de una auténtica autonomía en muchos aspectos y que se verá obviamente incrementada a la sombra de esta regulación para lo público.
CONCLUYENDO: en esta propuesta, Autonomía no hace referencia a la potestad de algo o alguien (en este caso los centros educativos) para regirse mediante normas propias y órganos de gobierno propios, tal como se define el término, ya que tanto una cosa como la otra van a estar definidas por una estructura superior y cualquier decisión importante estará supeditada a ella.
Aquí, Autonomía=Procedimiento normativo para conseguir la mayor eficacia y la adecuada eficiencia (tal como se aclara en el primer párrafo), es decir: Autonomía=RESULTADOS.
Que se agarren los machos los equipos directivos.
Visto así, la cosa cambia. ¿No? y eso que aún no hemos salido de la primera frase.

Considero un error responder al apartado II PROPUESTAS A DEBATE sin haber leído y comprendido bien el I: REFLEXIONES SOBRE LA AUTONOMÍA donde se presenta el debate de un modo absolutamente falaz.
Si partimos de la premisa de que el argumento inicial (ad logicam) es una falacia, esto nos conduce forzosamente a que la conclusión final será falsa e irreal. Aunque también, y según nos indica la teoría e incluso la propia definición de sofisma, aunque la estructura de razonamiento pueda ser falaz por su construcción o por sus premisas, la conclusión pueda llegar a ser fortuitamente correcta, dudo mucho de que tal conclusión se manifieste en el caso que nos ocupa.

Una falacia tiene mayor efectividad cuando se hace olvidar al receptor que la conclusión ya fue admitida como premisa.
Participar en el debate tal y como nos lo proponen supone admitir a ciegas una premisa/conclusión poco o nada conveniente. (to be continued)

domingo, 3 de abril de 2011

Tiempos Nuevos, Tiempos Salvajes


Sí, ya se que lo de poner el videoclip de Ilegales tocando Tiempos Nuevos, Tiempos Salvajes no es demasiado serio, pero he pensado que venía bien darle un poco de vidilla al blog y la canción... ¡parece bastante apropiada para el asunto!


Ramón.

"La posibilidad de conseguir fondos adicionales"

Más allá de la lectura del propio documento sobre la cuestión de la autonomía de centros que ha difundido la Junta de Comunidades creo que es interesante leer la nota de prensa difundida por el Gobierno de Castilla-La Mancha sobre esa misma cuestión. 

Como podéis comprobar en ella se habla de las cosas que puede proporcionar la futura autonomía de centros en el caso de que llegue a cuajar -por lo que parece todo son ventajas-. Entre ellas estaría la posibilidad de conseguir fondos adicionales. Personalmente pienso que debe ser rechazada la posibilidad de que a un centro público el estado le invite a lograr financiación por su cuenta.

Abrir la mano para que un centro logre financiarse en parte con aportaciones privadas puede sonar muy bien, pero no creo que sea algo bueno para la educación. Lo más que se puede conseguir es que la labor del profesorado se vea entorpecida al tener que ocuparse de asuntos que poco o nada tienen que ver con la docencia. Casi suena a algo así como "yo no tengo dinero para darte, pero el que tú logres por tu cuenta puedes quedártelo". 

Para lograr esa financiación en educación, que ahora se niega a los centros en tiempos de crisis, se podría optar por hacer lo que han hecho Islandia: no pagar con dinero público la deuda amasada por sus bancos, como ha hecho España a través de créditos blancos a la banca. Puede que suene demagógico pero justo hoy habla de eso el editorial del suplemento Negocios de El País.

Ramón Peco.

viernes, 1 de abril de 2011

¿Autonomía = Privatización?

¿Autonomía = Privatización?

No lo tengo tan claro. Finlandia es el ejemplo. Gran espacio de autonomía para los centros en un sistema  exclusivamente público para la educación básica. Ni que decir tiene que, dados sus resultados (1º en informe PISA), debemos tenerlo algo en cuenta.

Centralización vs Autonomía

Centralización vs Autonomía

http://www.fundacionsantillana.com/upload/ficheros/noticias/200911/ponencia_joan_estruch.pdf

ACTA ARTES DEL LIBRO SOBRE LA AUTONOMÍA DE CENTROS


Acta de la reunión del departamento de Artes Aplicadas al Libro:

1. Lectura y aprobación, si procede, del acta anterior.
2. Recogida de propuestas para propuestas para el documento de Autonomía de los Centros.

Se inicia la sesión y se da lectura al documento de referencia. Se debate y se acuerdan las siguientes propuestas.

Propuesta de debate 1. Sobre la estructuras de participación.

7. Podrán fomentar la suscripción de compromisos con las familias para la mejora del rendimiento escolar y la convivencia, y definirán los instrumentos y procedimientos de comunicación con las mismas.

Añadir las empresas que tengan convenios de colaboración en las FCT.

Propuesta de debate 3. Sobre las estructuras de coordinación docente.

Punto 9. Los centros docentes decidirán cómo se organiza la acción tutorial, determinando la distribución de los tiempos y las funciones de los tutores y tutoras que tengan asignados

Que el criterio principal para establecer  las horas de tutoría y nº de tutores sea las necesidades que establezca el perfil de alumnos del grupo.
Propuesta de debate 4. Sobre la concreción del currículo y las programaciones didácticas.
Punto 5. Así mismo, podrán ampliar y concretar los procedimientos e instrumentos de evaluación, y añadir más informes de evaluación a los establecidos con carácter oficial.
Que se eleven al departamento didáctico que corresponda la ampliación de competencias que se pretende atribuir al profesor.
Punto 6. Los centros podrán decidir sobre la distribución de horarios ( lectivos y no lectivos ) y el número de horas de cada área y materia, respetando los límites mínimo y máximo que se fijen normativamente. Podrán , igualmente, determinar la duración delas sesiones lectivas de cada área o materia, siempre que el tiempo total no sea inferior al mínimo fijado en la normativa.
Previa consulta y aprobación del departamento afectado.
Punto 7. Los centros podrán establecer el tipo y cantidad de agrupamientos, de acuerdo a los criterios que resulten más beneficiosos para el alumnado y con la única limitación del respeto a los principios y fines del servicio educativo.
Previa consulta y aprobación del departamento afectado
Punto 11. El profesorado adoptará y adaptará, en su caso, los materiales curriculares , sin que ello suponga aportación económica de las familias.
Especificar el nivel de estudios